Protecciones antivuelco de muros
Sistemas para la puesta en seguridad de forjados y revestimientos arquitectónicos de las superficies.
Protecciones antivuelco para muros de cerramiento internos y externos.
Durante un terremoto, la acción sísmica embiste el edificio en todas las direcciones, solicitando incluso los elementos no estructurales (en primer lugar los muros de cerramiento externos y en segundo lugar los internos), provocando un vuelco o expulsión fuera del envolvente, y poniendo en riesgo la vida de las personas. Las Normas técnicas para las construcciones 2018 dedican especial atención al diseño de los elementos no estructurales, que “aun no influyendo en la respuesta estructural son igualmente significativos para la seguridad y la incolumidad de las personas” (cfr. § 7.2.3 D.M. 2018).
El muro de cerramiento, sujeto a acción sísmica según el grado de solidarización con la estructura, puede manifestar los siguientes mecanismos de colapso:
A) Vuelco del muro de cerramiento;
B) Expulsión del muro de cerramiento.
● VUELCO DEL MURO DE CERRAMIENTO
Este mecanismo prevé la rotación rígida del muro de cerramiento alrededor de la rótula horizontal en la base, originada por los esfuerzos fuera de plano. Para que pueda verificarse dicho mecanismo, es necesario que la pared esté libre de moverse en la parte superior y no esté bien anclada a las paredes perpendiculares (o que éstas estén debilitadas). Para prevenir el riesgo de vuelco del muro de cerramiento interno y externo, se ejecuta una intervención de puesta en seguridad que prevé la solidarización del muro de cerramiento al marco estructural mediante la aplicación de redes y conectores Ruregold.
● EXPULSIÓN DEL MURO DE CERRAMIENTO
Cuando el muro de cerramiento es solidario al bastidor circundante, se puede instaurar un mecanismo de colapso con arco de tres rótulas a causa del alcance de la capacidad flexional en la sección de medianería. Este mecanismo puede verificarse cuando el muro de cerramiento está vinculado entre dos forjados, por lo que la presencia de un dispositivo de conexión en la parte superior impide el vuelco de la pared hacia el exterior, produciéndose entonces un henchimiento entre los dos planos interesados (que degenera en el cinematismo de arco de tres rótulas). La protección de seguridad que se realiza sobre el muro de cerramiento externo prevé la aplicación de mallas y conectores Ruregold dispuestos con configuración difundida o en cuadrícula, según las necesidades.
Las soluciones Ruregold
Según las necesidades de obra y de proyecto, Ruregold ofrece diferentes sistemas de construcción:
• Malla biaxial de PBO de 10/10 g/m2 (PBO-MESH 10/10) con mortero MX-PBO Masonry y conectores PBO-JOINT (y relativo mortero MX-JOINT).
• Malla biaxial de carbono de 42/42 g/m2 (C-MESH 42/42), con mortero MX-C 25 Masonry y conectores C-JOINT. (y relativo mortero MX-JOINT).
• Malla de fibra de basalto (B-MESH 200), con mortero MX-RW High Performance /MX-CP Lime /MX-15 Plaster /MX-C 25 Masonry /MX-PBO Masonry y conectores B-JOINT (y relativo mortero MX-JOINT).
• Mallazo electrosoldado en acero de alta galvanización (STUCANET SN MESH) con mortero MX-RW High Performance/MX-CP Lime/MX-15 Plaster
Verificación de los muros de cerramiento según el D.M. 2018
Como se dijo anteriormente, las Normas técnicas para las construcciones 2018 dedican especial atención al diseño de los elementos no estructurales, ya que éstos pueden colapsar y comprometer la seguridad general de las estructuras.
Las verificaciones de los elementos no estructurales exigidas por el D.M. 2018 se ilustran en la siguiente Tabla 7.3.III, en función de la clase de uso del edificio (CU I, CU II, CU III, según la definición del § 2.4.2) y del estado límite considerado. Se deduce que los elementos no estructurales (indicados con “NS”) requieren verificaciones de estabilidad (indicadas con “STA”) solamente para las clases de uso de 2 a 4 (por lo tanto se excluyen solamente las obras con presencia ocasional de personas y los edificios agrícolas) y para el Estado Límite de Salvaguardia de la Vida (SLV).
El control del daño (al Estado Límite de Daño, SLD, o, si se requiere, al Estado Límite de Operatividad, SLO) sobre los elementos no estructurales, como se aclara en la Circular explicativa 2019 del D.M. 2018 en el § C7.3.6.2, no es objeto de una verificación específica, ya que está asegurado por el cumplimiento de las verificaciones de rigidez de contención de los desplazamientos relativos de plano, según lo previsto en el § 7.3.6.1 para los elementos estructurales. Si resulta necesario ejecutar las verificaciones de estabilidad, el § 7.3.6.2 del D.M. 2018 prescribe comprobar que el elemento no estructural no sea “expulsado” bajo la acción sísmica equivalente (llamada Fa).
